En el entorno fiscal actual, las obligaciones contables de una empresa no solo se limitan a presentar declaraciones ante el SAT. La verdadera contabilidad —la que genera valor— permite tener visibilidad del negocio, anticiparse a riesgos y tomar decisiones con fundamento.
Si eres dueño de una PYME en México, este artículo es para ti: te explicamos qué implica realmente llevar tu contabilidad mensual, por qué no debes postergarla y cómo el cálculo oportuno de impuestos puede marcar la diferencia entre la estabilidad y el caos financiero.
La contabilidad mensual es el registro ordenado de todas las operaciones financieras de tu empresa, mes con mes. No se trata solo de guardar facturas, sino de analizar ingresos, egresos, activos, pasivos, y generar reportes financieros que permitan entender cómo está operando el negocio.
Costos innecesarios o fugas de capital
Si tus clientes están pagando a tiempo
En tiempo y forma con tus declaraciones fiscales mensuales
Para revisiones del SAT o auditorías externas
con base en información real, no en suposiciones
Financieros claros y puntuales
Preventiva, no solo correctiva
En tus declaraciones y pagos
En el manejo de tu información y acceso a herramientas digitales.
Con gusto te apoyamos a resolver cualquier inquietud que tengas
Un servicio contable te permite llevar un registro preciso y organizado de tus finanzas, cumplir con tus obligaciones fiscales y tomar decisiones informadas y estratégicas para el crecimiento de tu negocio. Además, te permite ahorrar tiempo y esfuerzo en la gestión de tu contabilidad y finanzas, para que puedas centrarte en lo que realmente importa: hacer crecer tu negocio.
Es importante buscar un contador que tenga experiencia y conocimiento en el giro de tu negocio y que pueda adaptarse a tus necesidades específicas. También debes asegurarte de que la empresa cuente con un equipo de profesionales altamente capacitados y actualizados en las últimas regulaciones fiscales y cambios en la ley.
El proceso de trabajo con un contador varía según el servicio contratado. Por lo general, se establece una reunión inicial para conocer las necesidades y requerimientos de tu empresa, luego se establece un plan de trabajo y se comienza a trabajar en la contabilidad y la gestión financiera de tu empresa. Es importante mantener una comunicación constante con tus contadores para asegurarte de que estás al tanto de tus finanzas y puedas tomar decisiones informadas.
Tu contador necesitará acceso a información financiera y contable relevante de tu empresa, como facturas, recibos, estados de cuenta bancarios, entre otros. Es importante que proporciones toda la información necesaria de manera clara y organizada para que puedan trabajar de manera eficiente y efectiva en la gestión de tus finanzas.